jueves, 28 de abril de 2016

Resaca post Sant Jordi

¡Prueba superada! Adiós Sant Jordi 2016. Ahora la última palabra está en manos del lector, nunca mejor dicho, los libros ya están en la calle, firmados o no, con dedicatorias o sin ellas. Los personajes duermen nerviosos esperando ser leídos, comprendidos o no, eso no lo sabremos hasta dentro de unas semanas cuándo las estadísticas de ventas  y los nuevos pedidos lleguen.

Tanto marketing y comunicación avanzada para acabar dependiendo de algo tan básico y eficaz como el llamado “boca-oído”. Es decir que al lector le haya gustado la obra y ahora la recomiende: comparta su opinión con el librero, con sus amigos, y si decidiera compartirla en alguna red social, el éxito sería absoluto.

¡Pobre escritor! Espera fama y éxito en un único día en el que parece que todo girará a su alrededor pero existen tantas flores en este jardín literario que hay que ser paciente y darle la libertad y la confianza que nos pide la obra. Debe enfrentarse al público lector sola -bueno, con alguna ayuda desde promoción y marketing- y debe exponerse al rechazo o al verse relegada a la última posición de una lista de lectura de algún lector con más tareas en su día a día que simplemente leer.
Todas las expectativas están inciertas y en el aire. ¡Qué sufrimiento más dulce! En el arte de escribir todo es lento: la creación, la producción, la distribución y la respuesta del público. Sin embargo otras artes son más generosas con sus creadores, por ejemplo, en el cine o el teatro si algo no gusta, después de ver la obra, el comentario se extiende y esa obra “muere” a nivel de crítica. Pero con un libro el último esfuerzo lo hace el lector al leerlo y requiere su tiempo.


La relación libro-lector es como enamorarse, alguien te seduce con sus textos introductorios y te va invitando a ir más lejos, a leerse por dentro, página a página, hasta que la historia se acaba, dependerá del argumento que te sientas feliz, completo o tal vez engañado  por haber dado tanto de ti mientras leías, el libro nos utiliza para ser una simple estadística de venta. Toca salir a por nuevas historias, queda mucho por leer. 

miércoles, 20 de abril de 2016

Hay un libro esperándote. ¡Sal a buscarlo!

Faltan horas para Sant Jordi,  todos los medios anuncian libros, ¿has decidido ya qué vas a comprar?
Quiero invitarte a que no compres lo primero que encuentres, si te fijas  con atención encontrarás los mismos títulos en los mismos rankings en, prácticamente, todas las grandes superficies.
¡Ves más allá! busca detrás de las primeras estanterías de compra espontánea. Indaga en la biografía del autor, intenta descubrir qué le hizo escribir ese libro.  Sin duda ahí afuera hay un libro que te está esperando para hacerte reír o llorar, o para acompañarte cada noche mientras te vence el sueño.
¡Hay tanto escrito! Lo mejor es que hay mucho más por escribir.
Sant Jordi es el Día Internacional del Libro en todo el mundo, la diferencia entre Catalunya y el resto del planeta es que aquí solo se compran libros ese día y que la mayoría no serán leídos. El resto de países, según estadísticas, compran una media de 8 libros al año y leen 12,5 títulos, la diferencia es debida a que leen en papel y en dispositivos electrónicos.
Tanto para el que le gusta leer como para el que no, Sant Jordi  es el día más bonito en Catalunya, todo el mundo está feliz y camina con una sonrisa. ¡Disfrutad del día! Y dejaros cautivar por la magia de los sueños impresos aunque solo sea por unas horas.

¡Feliz Sant Jordi!

Aquí mis libros recomendados en papel:

Todo lo que se…

 Carles Edo Marzal
 9788494458392
1ª edición- solo en papel-
Precio: 15,00E
Páginas 308       
Una novela fresca basada en el supuesto suicidio de una anciana y un cuadro que podría ser de Picasso. La historia es actual y dinámica se desarrolla en el barrio de Horta de Barcelona.
Es la 2º novela de este autor que ha sido uno de los mejores diseñadores de Barcelona y ha publicado varios libros de poesía y una novela, “Acompañando a Izan” , un thriller psicológico situado en una Barcelona futurista y deprimida por la lacra del paro.
  ¡Intriga policíaca con héroes de carne y hueso!

La naturaleza del fuego

Daniel Escriche
9788494234583
3ª edición-también en Ebook
Precio  10,00euros
Páginas 147
Una novela policíaca adictiva, dinámica y que deja al lector con ganas de una nueva novela sobre Victor, un personaje que cambia el punto de vista del crimen
Novela ganadora del 1ª Concurso de Novela de Castelldefels.
Autor premiado que se inició en nuestra editorial y en estos momentos está escribiendo su tercera novela. ¡Una apuesta segura!

En el mirador de los sueños  


Felip Ródenas
 9788494458385
1ª edición- solo en papel-
Precio: 18,00E
Páginas 576

Biografía novelada de la vida de Manuel Orantes con la participación de personas reales vinculados al ámbito del tenis. Una novela histórica en la Barcelona de la inmigración y las barracas con una trama romántica sensual y adictiva. ¡ Sencillamente extraordinaria!

miércoles, 13 de abril de 2016

¿Los libros se crean o se producen?

Esta semana en Londres, en la London Book Fair -LBF 16-, la segunda feria de la edición de libros y la venta de derechos más grande del mundo después de la de Frankfurt,  me he dado cuenta que todo el mundo quiere vender su libro. Y que la edición de contenido no es una carrera ni profesión tipificada, no hay ningún estudio universitario que te convierta en editor, es como un grado de profesionalidad artesana, yo diría artística, que solo se consigue con la práctica.
LBF 16, espacio de negociación de derechos
Si además añadimos que la edición de contenido escrito, ya sea libros o revistas, está controlada por las leyes de edición de cada país y son muy diferentes de un sitio a otro, la profesión se complica bastante.
Una de las cosas que me ha sorprendido estos días es el hecho de que hay varios países que viven de las subvenciones de su país por editar libros e invitan a otros países a solicitar esas subvenciones. Consideran  el escribir en su lengua un arte en extinción y deben protegerlo. ¡Admirable!

La relación editor – escritor puede ser lo que ellos dos quieran, es una relación comercial, privada y de ellos depende que llegue a ser personal. La confianza entre ambas figuras debe ser como la de abogado-defendido, o médico-paciente, pero desgraciadamente la realidad nos recuerda que hay muchos editores que no leen las obras que editan y tal vez ni conocen al escritor o creador de las mismas. Buscan dinero fácil, aquí y ahora, tener otra obra impresa, porque otra cosa que he aprendido estos días, es  a NO negociar con aquel que me pregunta, ¿Cuánto libros produces al año? Y  que cuando digo el número, ni me devuelve el saludo.

Mi objetivo  editorial no es producir un número X de libros al año, sino el crearlos junto al autor, distribuirlos y llegar a reimprimirlos. Lo que es el verdadero éxito para ambos. No sería mejor editora si hiciera 60 libros al año. En estos momentos si consigo que unos siete títulos puedan ser vendidos en otros países ya sería todo un éxito editorial y personal.  

Otras de las conclusiones a las que he llegado es que existe una realidad universal en la edición: el inglés es el mercado, si no editas en inglés no existes. Reino Unido y Los Estados Unidos controlan el 90 % de la producción y distribución de libros en el mundo, en todos los ámbitos, por supuesto también el académico que es un sector en sí mismo. Una de las expresiones que me llevo conmigo de estos días son las palabras de una especialista en contratos internacionales que dijo: “somos muy afortunados porque el mundo entero habla inglés”…Declaración poco afortunada ante un aforo donde la mitad de los asistentes éramos de países recónditos del planeta.

Lo único que sé es que mis obras, las vuestras, son las mejores del mundo, por sus intrigas, romances, sus sabores a Mediterráneo y que vamos a trabajar para que sean leídas en TODO EL MUNDO, hable inglés o no.

martes, 5 de abril de 2016

Madrid Barcelona, eternos rivales también entre letras

Amor-odio, Barcelona-Madrid, dualidad insalvable
Después de la resaca del partido del sábado entre el Barça y el R. Madrid  en el Camp Nou, dedico este artículo a todos los seguidores madridistas porque jugaron mejor y ganaron en un día especialmente emblemático para los barceloneses: el homenaje al eterno Johan Cruyff.

Rompo uno de mis principios editoriales: no hablar de política ni de fútbol. Pero lo haré desde una perspectiva diferente, las palabras, sello de origen y nacimiento de todos nosotros.
Barcelona  y Madrid no solo se diferencian por los equipos de futbol y el tener o no tener playa, existe una gran cantidad de palabras que se llevan de serie cuando naces en una u otra ciudad.

Aquí van algunos ejemplos

En Barcelona quedamos para “hacer” un café, mientras en Madrid se “va de cañas”.
A Barcelona se “baja” en tren, indistintamente de donde seas o a dónde vayas. Mientras que a Madrid se “va” en tren.
En Barcelona siempre nos despedimos con “Adéu” que significa “adiós” en catalán, aunque estemos en el centro de Madrid, o bien en la mismísima Plaza Roja de Moscú, siempre usamos “Adéu” aunque no hablemos catalán. 
Sin embargo en Madrid usan  “hasta luego” aunque la intención sea  no volverse a ver en la vida.
En Barcelona, las personas tienen “carácter o personalidad”.
En Madrid, “talante”.
En Barcelona, las cosas son “guays” o están  “genial”.
En Madrid son “fenomenal” o “molan mazo”.
En Barcelona, cuando alguien te informa de algo sorprendente respondes: “¡qué me dices!”  Y en Madrid, “¡qué me estás contando!”, o sea en Barcelona “decimos” cosas y en Madrid las “cuentan”.
En Barcelona, usamos zapatos para el deporte que llamamos “bambas” mientras que en Madrid se visten “deportivas” para realizar ejercicio físico.  En Barcelona vivimos en una “casa”, adosada  o individual, cuando en Madrid se vive en un “chalet” o en una “torre”.

La lista de esta dualidad insalvable es interminable, estos son solo unos pocos ejemplos que se podrían complementar con un sinfín de  detalles de nuestro día a día que nos hace irresistiblemente diferentes, tal vez sea esa perfecta relación que denominan “la atracción de los opuestos”:  condenados a atraerse, pero a la vez, a no entenderse.

Por si alguien todavía no lo tiene claro, yo soy del Barça, por nacimiento, es decir porque nací y crecí prácticamente enfrente del Camp Nou y sufrí todo lo que ello implica. Por esa razón no sigo el futbol y no se qué equipo es mejor en el campo.  Pero creo que el mundo del deporte  no se podría entender sin estos dos equipos “tan guays” que, cuando ganan, “bajan” a las fuentes respectivas de cada ciudad: véase la Cibeles, si gana el Madrid o bien la de Canaletes, cuando el afortunado es el Barça, pero las dos son fuentes.